Hoy ha dimitido el Sr. Camps. Podía y debía haberlo hecho hace tiempo. Y casi estoy convencido de que el propio tiempo le hará justicia en parte, y no habrá nada.
Pero las apariencias importan, y estando rodeado de gentuza a la que debían haber evitado como se hizo en Madrid, que encima se pueda sospechar que te has llevado unos trajes hace que la cosa se vea con lentes de gran aumento. La dimisión no debía ser sólo por los trajes, que son una chorrada como la copa de un pino, y más si los comparamos con los caballos pura sangre y los áticos que le regalan los constructores al Sr. Bono.
La dimisión debía haber sido sobre todo por no atajar esa panda de corrompedores que pululaban por los despachos.
Pero lo peor de todo, políticamente hablando, es haber dado pábulo a que los medios de intoxicación masiva (MIM) o falsimedia del PSOE hayan estado años con el Gürtel para arriba y Gürtel para abajo, sin dedicar una sola linea a las corruptelas andaluzas de Chaves y Griñán (fondo de reptiles), las manchegas de Bono y Barreda (de ático a ático y tiro por la borda 2000 millones de euros), las catalanas de Montilla calladas para que no salgan las de CIU…pero las ocultaciones más graves no son éstas, que son como la tinta del calamar, y de color negro. Éstas eran para ocultar las que de verdad hay que esconder a toda costa, incluso matar para ocultar…ocultar que mataron.
Y CADA DÍA MÁS
Las ocultaciones más graves han sido las que convierten a esta democracia en una dictadura con apariencia de democracia. El 11M es su principal exponente, y es el inicio, junto con el Pacto ETA-PSOE de 2002 (tanto monta, monta tanto), de la falsificación de nuestra democracia, ordenada por el NWO y llevada a cabo por ZP y sus iluminados.
Por eso desde aquí quiero dejar claro que soy otro peón negro, otro más, en contra del olvido. Y por ello quiero recordar unos datos que volverán a aparecer en el futuro, como el fantasma del pasado que ronda a la cúpula de Interior del Sr. Rubalcaba y del Sr. Antonio Camacho hoy . la sombra del Faisán es alargada, muy alargada, y la cola llega hasta el 11M y el 2002…
Transcribo por ello unos datos de los Peones Negros
«En el primer análisis de explosivos aportado al sumario del 11-M, realizado en los laboratorios de los TEDAX, no se especificaba el explosivo utilizado en los atentados ya que hablaba de «componentes genéricos» de dinamita sin especificar la marca, mientras se concluía que el arma homicida fue Goma2 Eco por las muestras de explosivo intacto aparecidas en los distintos escenarios situados fuera de los trenes: Kangoo, Mochila de Vallecas, atentado del AVE y Leganés.
Por ello, el 31/01/2007 el tribunal del 11-M ordenó una nueva pericial sobre los explosivos, formada por 4 peritos oficiales y 4 independientes, que se llevaría a cabo en los laboratorios de la Policía Científica, con más y mejores medios que los de los TEDAX, y cuyas sesiones se deberían de grabar en video. Pero la macropericia deparó importantes contradicciones ya que en los nuevos análisis aparecieron 2 componentes, el DNT y la nitroglicerina, que no forman parte de la Goma2 Eco y sí de otros explosivos como el Titadyne. Sin embargo, el tribunal determinó que el explosivo utilizado fue Goma2 Eco en base a un componente, el ftalato de dibutilo, sobre el cual los peritos oficiales sostuvieron en el juicio que era un componente exclusivo de dicho explosivo.
NO HABRÁ VUELTA ATRÁS EN LA DEMOCRACIA
Sin embargo, gracias a la Asociación de Ayuda a las Víctimas del 11-M se ha tenido acceso a dichas imágenes, denegadas sistemáticamente a la partes a lo largo de 3 años, que ponen en entredicho la tesis sostenida por los peritos oficiales en el juicio y en las que afirman que el ftalato de dibutilo es un componente genérico que se halla en numerosos componentes plásticos y que, por lo tanto, no puede ser específico de ningún tipo de explosivo.
Con todo ello, la versión oficial, en cuanto al explosivo utilizado, ya no se sostiene.
http://www.youtube.com/watch?v=VSDFoR9dfoI
¡¡¡ PÁSALO !!!»
EL DÍA DE LA VERDAD ESTÁ LLEGANDO
NO AL OLVIDO. CADA DÍA HABRÁ MÁS PEONES NEGROS.
Crónicas de Murchante City 